A partir del miércoles 12 de noviembre de 2025, la compañía aérea irlandesa Ryanair impone una nueva norma: ya no se aceptarán las tarjetas de embarque impresas. A partir de ahora, sólo será válida la versión digital, a través de la aplicación móvil de la compañía aérea. En su comunicado de prensa, Ryanair afirma que esta tarjeta de embarque digital se enviará cuando realices la facturación en línea, y que seguirá siendo accesible sin conexión a través de la aplicación.
Para ti, como viajero a Irlanda, esto supone un cambio concreto: olvídate de imprimir tarjetas de embarque de papel en el último momento en casa o en el aeropuerto, ¡y utiliza en su lugar tu smartphone!
Ryanair aduce varias razones: en primer lugar, una razón ecológica: reducir el uso de papel e impresiones en los mostradores de los aeropuertos. Luego está el deseo de optimizar la experiencia del usuario y racionalizar los costes: fin del pequeño gesto de imprimir, mostradores de embarque «de papel», procesos más remotos.
La compañía señala que alrededor del 80% de sus 207 millones de pasajeros al año ya utilizan la tarjeta digital.
Sin embargo, algunas asociaciones de consumidores denuncian una posible «brecha digital»: no todos los pasajeros se sienten cómodos con los teléfonos inteligentes ni tienen necesariamente un acceso fiable a Internet o un teléfono cargado.
Si estás planeando un vuelo a Irlanda con Ryanair, es mejor que te anticipes a cualquier problema que pueda surgir: batería baja, aplicación no descargada, conexión inestable.
Si utilizas Ryanair para un vuelo hacia, desde o vía Irlanda (por ejemplo a Dublín, Cork o Shannon), estos son los puntos que debes tener en cuenta:
Para un viajero que venga de Francia o Europa a Irlanda con Ryanair, este cambio se produce en un momento en que la experiencia aeroportuaria ya puede ser estresante: trámites, reanudación del horario de vuelo, recogida de equipajes, etc. Aquí tienes algunos consejos más:
El paso a la tecnología 100% digital ha suscitado reacciones encontradas. Para algunos pasajeros, es una ganancia: no hay más papel que gestionar, todo está ya en la aplicación. Para otros, es una fuente de ansiedad: «¿Y si se me estropea el teléfono?», «¿Qué pasa con los pasajeros que no tienen smartphone? Como dijo un pasajero: «Los que quieran seguir en papel deberían poder hacerlo».
Una asociación señala que «alrededor del 30-40%» de las personas no tienen smartphone ni paquete de datos, lo que podría plantear un problema.
Para quienes viajen a Irlanda, esta medida supondrá una mayor atención a la preparación digital. Pero a largo plazo, podría simplificar el flujo de personas por el aeropuerto, reducir los tiempos de espera en las taquillas y permitir a Ryanair repercutir parte del ahorro en tarifas y servicios.