A partir del 8 de enero de 2025, el Reino Unido ha introducido un nuevo requisito de Autorización Electrónica de Viaje (ETA) para los viajeros procedentes de más de 50 países, incluidos todos los EE.UU. y algunos países europeos. El sistema se aplica a los viajeros que no necesitan visado para una estancia corta (hasta seis meses) y que no tienen ya estatuto de inmigrante en el Reino Unido o Irlanda del Norte.
Los ciudadanos británicos e irlandeses, así como los de los países de la Unión Europea (UE), el Espacio Económico Europeo (EEE) y Suiza, no se ven afectados por este nuevo requisito. De hecho, estos nacionales pueden seguir entrando en el país sin necesidad de solicitar esta autorización, en virtud de los acuerdos de libre circulación que siguen vigentes a pesar del Brexit. Sin embargo, los viajeros europeos con doble nacionalidad, sobre todo con un país de fuera de la UE, tendrán que comprobar si su estatus les obliga a solicitar una ETA.
Esta nueva norma se aplica a los visitantes que deseen viajar al Reino Unido, incluida Irlanda del Norte, por diversos motivos: turismo, visitas familiares, negocios, estudios de corta duración o incluso tránsito. La ETA, que es una autorización digital vinculada directamente al pasaporte del viajero, debe obtenerse en línea antes de la salida. No es necesario esperar a obtener un visado u otra autorización para permanecer en el Reino Unido menos de seis meses.
El sistema ETA está diseñado para reforzar la seguridad del control fronterizo y facilitar los procedimientos de inmigración. Es similar al sistema ESTA introducido por Estados Unidos, y permite una gestión más eficaz de los viajeros al tiempo que aumenta la seguridad.
Los viajeros tendrán que presentar una sencilla solicitud a través de un formulario en línea. Es importante señalar que las personas que ya tengan un visado o la condición de residentes en el Reino Unido, así como los ciudadanos británicos e irlandeses, no se verán afectados por la ETA.
En resumen, este nuevo requisito afecta principalmente a los nacionales de determinados países de fuera del Reino Unido y de la Unión Europea, pero no afecta a los ciudadanos de los Estados miembros de la UE, del EEE y de Suiza, que pueden seguir viajando libremente por estos territorios sin necesidad de una ETA.