Luces y adornos navideños de Dublín

Luces y adornos navideños de Dublín

Temple Bar à Noël

¡En Navidad, Dublín es sencillamente mágica! Hay que decir que los dublineses están muy apegados a la Navidad… ¡y saben muy bien cómo hacer que su ciudad sea mágica! Decoraciones exageradas, mercadillos navideños festivos, conciertos callejeros, villancicos tradicionales en los que se reúnen los transeúntes… Y no nos olvidemos de las luces de Navidad, que llenan los barrios más bonitos de Dublín. Para que no te pierdas nada de esta magia, aquí tienes un resumen de las mejores decoraciones navideñas de Dublín.

Navidad en Dublín: ¡una explosión de color!

¡Cuando los barrios y los grandes almacenes rivalizan en inventiva!

Arnotts en Dublín

Arnotts en Dublín

Todos los años ocurre lo mismo: cuando llega noviembre, los barrios y los grandes centros comerciales compiten para ver quién decora las Navidades más bonitas.

Y entre los finalistas, suelen ganar los mismos: entre Temple Bar, con su legendario pub de fachada roja, que cuelga un árbol de Navidad en la pared y decora su local con increíbles guirnaldas… y el gigante Arnotts, unos históricos grandes almacenes de la ciudad, ¡a los que les gusta transformar sus escaparates en un vibrante homenaje a la Navidad! Cascanueces gigantes, increíbles muñecos de nieve, autómatas animados, recreaciones de cuentos navideños…

¡Hay para todos los gustos!

Incluso el centro comercial St Stephen’s Green (un enorme centro comercial de Dublín) está renovando por completo su invernadero. Bolas de Navidad gigantes, guirnaldas de luces… No se ha olvidado nada para hacer soñar a grandes y pequeños.

Atracciones para toda la familia

Centro Comercial Stephen's Green en Navidad - William Murphy - cc

Centro Comercial Stephen’s Green en Navidad – William Murphy – cc

Pero eso no es todo. En Dublín, la magia de las fiestas está por todas partes: en las calles, en los mercados, en los pubs y restaurantes… Incluso los museos se suman a la fiesta para ofrecerte una aventura llena de magia.

Tanto es así que es fácil dejarse llevar, ¡e incluso sentirás la tentación de dar un paseo en coche de caballos por el barrio de Temple Bar!

Desde un chocolate caliente a un bollo de canela, todo mientras escuchas villancicos… No podrás escapar del ambiente festivo y familiar.